Descripción
159 páginas. Colección Primor, 44. “Cuando en un pecho florece el amor, comienza el dolor.” Eso dice un refrán clásico, y ésa es la historia que se repite en cada corazón. Amando se sufre mucho, hasta el infinito. . . Y lo peor es cuando el gran cariño está velando los ojos del entendimiento, porque comienza la CEGUERA DE AMOR: amamos sin advertirlo; buscando el amor escapamos de él. ¡Destino que algunas almas se traen a la vida! La pequeña Vancssa, hermosísima y delicada como figulina de Tanagra, casó con el conde Huberto de St. Austel, así, de la noche a la mañana, sin que ambos lo pensaran demasiado; pero junto a ellos estuvo la sombra constante de Alicia de Lincolnwood, dama británica del gran mundo, fascinadora mariposa que vino a quemar sus alas en la hoguera de su amor incontenible. Y fue entonces cuando la audacia del banquero Benjamín Levy tuvo el coronamiento que ansiaba su espíritu al imponer el matrimonio de su hija.
