Descripción
299 páginas. Wolfe Quinlan murió en un cuarto cerrado. Lo encontraron en su estudio, con la única llave en el bolsillo, y con la afilada espada de una armadura medieval clavada entre las costillas. Había amado la vida, y tomado de ella lo que quiso, pero estaba rodeado de enemigos: su maltratada esposa, sus hijos, la amante que se negaba a seguir viendo, el socio a quien había traicionado, un abogado no demasiado honesto, el sacerdote loco cuyo “culto diabólico” había rechazado violenta y súbitamente. El padre Ryan interroga a los miembros de la familia. Debe encontrar la causa de la muerte de Quinlan… para que no muera nadie más.