Descripción
189 páginas. Colección “Biblioteca de la historia”. Título original: Luther. Traducción: Salvador Cabré. Obviamente, y dado el carácter mismo de su elaboración, las cien páginas largas que componen el Lutero de Albert Greiner habrían de ser objeto de diatriba en el momento en que fueron dadas a la imprenta. Si el autor del prefacio, René-J. Lovy, encontraba en la obra unos méritos que eran capaces de situarla por encima de todas las demás, los críticos católicos aducirían su carácter ensalzatorio para la figura del biografiado. Con todo, en ningún caso la obra de Greiner fue tratada como instrumento propagandístico, acusación comúnmente aplicada a las actividades de los llamados «protestantes» en nuestro país hasta hace muy pocos años. La biografía de Martín Lutero que sigue a estas líneas introductorias es una recreación, sin duda fuertemente influida por la condición personal de su autor, de una época y un hombre que observado desde hoy actuó sobre ella de forma determinante. Lutero aparece como un personaje ante todo común, que en un momento determinado va a verse desempeñando un papel para el cual ni siquiera se había planteado la posibilidad de prepararse. Esta circunstancia, podría decirse que humanizadora, del reformador actúa como instrumento de acercamiento de éste hacia el público lector de la obra que publicamos a continuación. El panorama social español ha variado sensiblemente desde aquel año 1968 en que esta obra vio la luz en nuestro país, las posibilidades que ofrece su lectura son, por tanto, muy diferentes a aquellas en las que se hablaba de Lutero como de un hombre en lucha con su Dios, tratado por su biógrafo en forma cordial y religiosa. El fenómeno supuesto por la figura social e histórica de Lutero enriquece en medida definitoria a toda concepción basada únicamente en parámetros de índole religiosa. Es de esta forma como deben observarse —si se pretende la obtención de una impresión de conjunto válida— la persona del agustino alemán y la época de la que se erigiría como más efectiva representación. Despojada toda visión de Lutero y su doctrina de los visos de marginalismo a que la imposición de una religiosidad oficial las habían confinado, resulta hoy posible un acercamiento a su realidad. Sin caer en directas aceptaciones de unas premisas que resultan susceptibles de consideraciones más profundas, la obra de Greiner aporta informaciones veraces cuyo valor supera ampliamente toda limitación que una simple hagiografía pudiera suponer.
